Chile. Atlas Americano.

Chile. Atlas Americano.
  • Leela Rambourg ( université Paris Panthéon-Sorbonne)
  • Este mapa es una representación artística de Chile, en la que no se destacan las fronteras, capitales, grandes ciudades, estados o provincias, sino las especificidades culturales, geográficas, históricas y ecológicas de cada país. Fue realizado con la participación de los habitantes del país.

  • Una imagen de Alejandra Vega, Natalie Guerra, Sol Undurraga y Mujer Gallina. 2017 (Chile). Este mapa es una representación artística de Chile, en la que no se destacan las fronteras, capitales, grandes ciudades, estados o provincias, sino las especificidades culturales, geográficas, históricas y ecológicas de cada país. Fue realizado con la participación de los habitantes del país.

  • No es el Chile de los mapas oficiales, sino el Chile de la gente, de sus costumbres y de los distintos grupos que lo componen. El territorio no es simplemente una representación en un mapa; es un espacio vivido en el que influyen las personas que lo habitan y que, a su vez, influyen en ellas. El atlas también concede un gran espacio a la biodiversidad de cada país. Esta saturación de la imagen con elementos culturales dispares intenta captar la riqueza y diversidad de estas zonas. La cultura popular y la cultura «oficial» se superponen sin jerarquía. Pablo Neruda está junto a un surfista, mientras que Gabriela Mistral (Premio Nobel de Literatura en 1945) está junto a un volantín (un tipo de cometa fabricada en Chile). Los colores, muy vivos, y el grafismo infantil confieren cierta vitalidad a la imagen, que se sitúa en las antípodas de la seriedad de los mapas oficiales o científicos. Se presenta una visión optimista y decididamente positiva de Chile. Destaca sus cualidades más que sus problemas, como la dictadura de Pinochet (1973-1990). Es interesante ver que el mapa incluye a varios pueblos indígenas, como los selk’nam, víctimas de un genocidio en el siglo XIX, y los mapuches, con Lautaro, un jefe mapuche del siglo XVI que se opuso a los españoles cuando llegaron a Chile.
    Creo que este mapa, y el libro en general, son interesantes porque adoptan un enfoque opuesto al de un atlas tradicional. Un atlas tradicional del territorio chileno se centraría en la capital, las grandes ciudades, las fronteras entre las distintas regiones de Chile, los ríos y los países vecinos. Nada de esto ocurre en los mapas de Alejandra Vega, Natalie Guerra, Sol Undunrraga y Mujer Gallina, que sólo dan un lugar muy pequeño a las ciudades y borran las fronteras interiores y exteriores. Imponen sus propias visiones artísticas para representar su continente a su manera. La cartografía oficial se transforma radicalmente, Valparaíso tiene su propia ilustración, mientras que Santiago sólo tiene una figura especial. Son los habitantes los que están representados, el territorio ya no está congelado en un mapa, sino que cobra vida. Este mapa y los demás del atlas ofrecen a los lectores de fuera de América una visión diferente de estos países. Estos autores e ilustradores sudamericanos quieren representar la historia oficial y popular de los países latinoamericanos desde el punto de vista de los lugareños. Los ilustradores destacan los pueblos indígenas y sus costumbres, como la Fiesta de La Tirana en el norte del país. El mapa se creó con la participación de los residentes locales.
    Dan una visión de un país del «Sur», al tiempo que proceden del «Sur». Alejandra Vega lo dice ella misma: «El propio continente americano, como unidad geográfica, se inventó en esa época, cuando distintos actores del mundo europeo se apropiaron de territorios lejanos para verter en ellos sus aspiraciones económicas, religiosas y políticas. A lo largo de las décadas y los siglos, las experiencias de las sociedades americanas han dado lugar al desarrollo de nuevas ideas, nuevos proyectos y nuevos mapas del espacio que hoy habitamos. Este atlas americano refleja una larga tradición en la que el mapa se utiliza para imaginar, mostrar, conocer y explorar el mundo a través de la mirada. En este atlas hemos querido reflejar la rica historia de nuestro continente, en la que confluyen los pueblos indígenas y las diferentes culturas migrantes de Europa, África y otras partes del mundo». Alejandra Vega es historiadora y actualmente trabaja en el ámbito de la educación en la Subsecretaría de Patrimonio Cultural (Ministerio de Cultura, Chile). Quiso que los habitantes de los distintos países participaran en la creación del mapa de su país.
    Sin embargo, los autores omitieron a Salvador Allende, una de las figuras chilenas más conocidas en el mundo. La historia política reciente y sus tragedias no figuran en este mapa.
    (Traducido por DeepL)